QUÉ MÁS PUE…

 

CARLOS RAFAEL COUTIÑO CAMACHO.

1.- Pantelhó

2.- Fiestas vs COVID

Lo que se ha visto en el municipio indígena de Pantelhó, Chiapas; no es responsabilidad de los habitantes, ni de quienes participaron en el proceso electoral, los únicos encargados de fomentar el encono y crear beligerancia es el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC).

Vamos por pasos, lo que el grupo de autodefensa «Machete» argumenta es que el presidente electo es esposo de la actual presidenta municipal, según la ley electoral esto es imposible, el ejemplo se vio cuando el entonces presidente municipal de Chiapa de Corzo, Sergio David Molina Gómez «cedió» el cargo a su hermano Jorge Humberto.

La ley se le aplicó y se señaló que eso era imposible, por lo que hubo cambio de candidato y se nombró a otro, si bien es cierto a discreción, pues fue manipulado por estos hermanos, para luego ahora sí, en el proceso que está por concluir el 1 de octubre de este 2021, ocupara la presidencia Jorge Humberto Molina Gómez.

Si hay antecedentes de ello y se ha observado en otros municipios la aplicación de la ley, luego entonces porque no se hizo en tiempo y forma en el caso Pantelhó, lo que muestra que es todo el equipo humano del IEPC quien es responsable de ello.

Pero también hay que señalar al Poder Judicial de Chiapas, aunque no corresponde directamente a Juan Oscar Trinidad, si al encargado de emitir el documento donde se cita que no tienen antecedentes penales, es más, si se paga un extra, lo entregan el mismo día, sin investigación alguna.

El IEPC pide a los candidatos el documento de antecedentes no penales y ahí está el problema, porque los indígenas denunciaron en tiempo y forma que hay asesinatos, violencia provocada por el grupo narcotraficante que impera en la zona.

Cual fuera corrupción, está tan podrido que los problemas electorales son producto de todo eso, muchos ganaron por la compra de votos, aquí la corrupción es mayor o recae en la gente que aceptó.

Pantelhó es uno de los casos que se han observado en Chiapas, el propio gobernador Rutilio Escandón Cadenas, en Chiapa de Corzo fue contundente y señaló que lamentaba que presidentes municipales hayan entregado dinero a cambio de votos, los señaló con índice de fuego y los descalificó.

Lo que es real, es que Pantelhó es un asunto entre Zapatistas y Narcotraficantes, hasta hoy ambos han sido utilizados para perjudicar a Chiapas, lo afectan en todo, en economía, turismo, desarrollo, bienestar, la gente le da miedo conocer la entidad.

Donde está aquello de los tan llamados y afamadas acciones de «Canje de Armas», aquí se ve la farsa, se les quitó a la sociedad que no sabía que implica ello, además de que lo entregado fueron pistolas oxidadas y escopetas inservibles, pero las verdaderas ahí están sirviendo a los grupos.

Si alguien sabe en Chiapas, como tratar estos temas en lo jurídico, pacificación, dialogo, desarrollo y justicia, es el propio Rutilio Escandón, quien como abogado, integrante de la COCOPA, de ideas izquierdistas, líder de grupos sociales en su momento, es quien puede solucionarlo.

COVID

Si bien es cierto que se habla de un mayor número de casos de esta enfermedad, también es cierto que para la población no le importa mucho, al menos la mayoría, la muestra es que está preocupada por las ventas que por la salud, se ocupa de pasear que por la vida.

Para muestra es que hay molestia ante el posible anuncio que se estaría haciendo de la suspensión de las fiestas de pueblo, una de ellas la más cercana para el caso Tuxtla, capital de Chiapas; la feria Chiapas que inicia en noviembre y finaliza en diciembre.

Muchos aseguran que no habrá por el tema de la COVID, otros más por otras razones, lo cierto es que se conjuga todo y hoy esa feria comercial que de cualquier forma iba terminando por la forma de desarrollarla, hoy se conoce que no será posible por segundo año.

Pero los capitalinos no están molestos en realidad por eso, ya que lo único que valía la pena eran los artistas y en las últimas ocasiones fueron de los más simples, por lo que el palenque de gallos era el único atractivo real, no para todos sino para quienes pueden pagar su ingreso.

En donde ya hay gritos en el cielo es en Chiapa de Corzo, pues de seguir los casos como hasta ahora, es posible en septiembre se de el anuncio de que no habrá fiesta tradicional, lo que si haría es un problema no para el comercio, sino para muchos de la población, que están deseosos que sea ya una realidad ante la suspensión en este 2021.

Solo decir no habrá fiesta en Chiapa, es un verdadero castigo, aunque esa tradición deja de ser ancestral y auténtica, para pasar a manos de los grupos cerveceros, la fiesta no es tal, es un lugar donde la venta de bebidas embriagantes se eleva, por lo que ese es el problema en realidad.

De acuerdo a la historia, hubo momentos en que se tenía que suspender, ya que no estaba tan arraigada como ahora, no hay que olvidar la guerra cristera, tampoco hay que olvidar otras pestes, de tal suerte que si hubo momentos en que no se contó con la presencia de los Parachicos en particular.

De 1900 cuando inicia como conocemos la fiesta y feria, sería quizá la tercera ocasión en que se presenta un no, de esa fecha a la actualidad ha tenido modificaciones y en algunos casos se han perdido algunos puntos y otras la han enriquecido.

Por lo pronto, solo en otros pueblos han dado su permiso para la celebración de fiestas, en particular las zonas indígenas, pero en las grandes manifestaciones simplemente sigue siendo no, es de citar que a pesar de ello, no debilita en nada su fuerza y por el contrario, será mayor cada vez, los Parachicos siguen, aunque no se presenten en 2022.